jueves, 22 de julio de 2010

Santo Tomás de Aquino V

2.4. Trascendentalidad de Dios.
La causa tiene que ser también trascendental. Hay un nuevo tipo de trascendentalidad llamada causativa. Es causa trascendental aquello cuya virtud causal se extiende a todos los efectos. Este papel le corresponde a Dios. La metafísica es onto-teológica. Cuanto más ambas cosas más filosofía es, según Heidegger. Pero él olvidó, se le hizo cuestionable, el carácter onto-teológico de la metafísica, no por ateísmo sino porque no era capaz de pensar la unidad entre lo ontológico y lo teológico, porque todo ha de tener fundamento, incluso el fundamento, y cae en la auto-suficiencia, es decir, Dios como causa sui, sustituye el infinitismo por el circularismo. La única forma de evitar a Heidegger es afirmar que Dios es causa trascendental de todas las cosas. Es causa trascendental en el orden eficiente, todos los entes dependen de Dios en el origen, en cuanto lo imitan -causa ejemplar, verdadera participación. Por eso en la sabiduría divina se encuentran las razones (ideas) de todas las cosas. Todos los seres tienden a Dios, es causa final, obediencia del destino, manifestación de la perfección de Dios. Las tres causas son una y la misma en Dios.

2.5. La analogía entis.
Analogía es semejanza, conveniencia y diferencia entre las cosas que se dicen semejantes. Las cosas análogas coinciden y difieren en parte. Por ello la analogía es una forma de predicación, se predica lo significado por un término, de varios sujetos a los que se atribuye. Esta predicación puede adoptar tres formas: unívoca (resultado de la abstracción completa), análoga y equívoca. La predicación analógica en la que se toma el término en parte igual y en parte desemejante. La analogía participa en cierto modo de la unicidad y la equivocidad. Comience con la unicidad en la unidad del término y en la semejanza de significaciones. Difiere en que la semejanza es imperfecta. Conviene con la equivocidad en la unidad del término y en la desigualdad de significaciones. Difieren en que la desigualdad es parcial. Existen dos grandes clases de analogía: de atribución y de proporcionalidad. La analogía se puede dar entre formas o entre relaciones. Entre formas de atribución, se da cuando se comparar un término (forma) con otro y de proporcionalidad cuando se compara una relación entre dos términos con otro A es a B como C es a D. A su vez la atribución se divide en extrínseca (cuando lo significado por el término análogo se encuentra solo en uno de los objetos a los que se aplica -primer analogado. En los otro términos no está lo significado por el término. Se les aplica por la relación que guardan con el analogado principal (por ejemplo, lo sano); es intrínseca (cuando lo significado por el término análogo se encuentra en todos los sujetos a los que se le aplica el término pero de manera desigual. En uno de ellos de manera perfecta, en los otro de modo imperfecto -por ejemplo el bien, el ente). En cuenta a la analogía de proporcionalidad puede ser: propia (cuando lo significado por el término análogo se realiza en todas las parejas de sujetos, por ejemplo el conocimiento sensorial es a los sentidos, como el intelectual al entendimiento); impropia o metafórica (cuando la realidad significada por el término análogo se realiza de manera propia en una de las parejas. En la otra se realiza en sentido metafórico.
El ente es análogo de muchas maneras. Lo difícil es definir qué tipo de analogía posee. Analogía de atribución intrínseca y de proporcionalidad propia. El ente se puede enfocar como nombre o como partícipe. Nominalmente es directamente la esencia e indirectamente ser. Ente como nombre es analogía de atribución intrínseca porque hay una gran jerarquía y orden que le vienen de la esencia. Es la causa de que el ser mismo esté graduado. El existir sólo se diversifica por la esencia. Ente como verbo es analogía de proporcionalidad propia. O se es o no se es. No hay término medio. Es una semejanza de relaciones que no entraña orden: se pueden establecer cuatro términos. Existencia A a su esencia A es lo que la existencia B es a la esencia B.

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